¿Hay documentos históricos sobre Jesús?

Vamos a pasar revista a las fuentes extrabíblicas sobre Jesús en orden cronológico. Aparece como encabezado el autor del texto, su profesión y el año en que escribió. Transcribo la cita y destaco al final su importancia.

Mara Bar Serapión

Filósofo estoico (año 73)

¿De qué sirvió a los atenienses haber matado a Sócrates, crimen que pagaron con el hambre y la peste? ¿O de qué sirvió a los samios quemar vivo a Pitágoras, cuando todo su país quedó cubierto de arena en un instante ¿O a los judíos dar muerte a su sabio rey, si desde entonces se han visto despojados de su reino? Porque Dios se tomó justa venganza por esos tres sabios: los atenienses murieron de hambre, los samios fueron inundados por el mar, los judíos sucumbieron y fueron expulsados de su reino, y viven dispersos por todas partes. Sócrates no murió, gracias a Platón. Ni Pitágoras, gracias a la estatua de Hera. Ni el rey, gracias a las nuevas leyes que promulgó. (Carta de Mara Bar Serapión a su hijo desde la cautividad)

Importancia: Esta carta fue escrita por un filósofo estoico, de origen sirio, que admiraba la sabiduría y la entereza de los hombres de la antigüedad. Jesús es mencionado indirectamente con el apodo de “sabio rey”. Como cristianos no compartimos la opinión de que Dios haya rechazado a los judíos por haber matado a Jesús , sin embargo, como la destrucción del templo de Jerusalén acababa de ocurrir (en el año 70), los cristianos de Siria -de origen gentil (goi) la mayoría- interpretaban en ese sentido la dispersión del pueblo judío. Posiblemente fue de sus vecinos cristianos que Mara Bar Serapión escuchó acerca de Jesús.

Flavio Josefo

Historiador judío (año 93-94)

En aquel tiempo apareció Jesús, un hombre sabio, si verdaderamente se le puede llamar hombre. Porque fue autor de hechos asombrosos, maestro de gente que recibe con gusto la verdad. Y atrajo a muchos judíos y a muchos de origen griego. [Él era el Mesías.] Y cuando Pilato, a causa de una acusación hecha por los hombres principales entre nosotros, lo condenó a la cruz, los que antes lo habían amado no dejaron de hacerlo. [Porque él se les apareció al tercer día, vivo otra ves, tal como los divinos profetas habían hablado de estas y otras innumerables cosas maravillosas acerca de él.] Y hasta este mismo día la tribu de los cristianos, llamados así a causa de él, no ha desaparecido. (Antigüedades de los judíos XVIII.3.3)

Importancia: Lo que está entre corchetes probablemente sea un añadido hecho por algún copista cristiano. El texto, aún sin los añadidos, menciona directamente a Jesús y a Poncio Pilato.

Tácito

Historiador romano (año 115)

Por tanto, para acallar el rumor, Nerón creó chivos expiatorios y sometió a las torturas más refinadas a aquellos que el vulgo llama ‘cristianos’, [un grupo] odiado por sus abominables crímenes. Su nombre proviene de Cristo, quien, bajo el reinado de Tiberio, fue ejecutado por el procurador Poncio Pilato. Sofocada momentáneamente la nociva superstición se extendió de nuevo no sólo en Judea, la tierra que originó este mal, sino también en la ciudad de Roma, donde convergen y se cultivan fervientemente prácticas horrendas y vergonzosas de todas clases y de todas partes del mundo. Se empezó por coger a los que se confesaban cristianos y, a continuación, en base a las declaraciones de estos, se detuvo a una inmensa multitud, que estaba menos convencida de haber incendiado Roma que de cargar con el odio del género humano. (Anales 15.44)

Importancia: Confirma datos registrados en el evangelio de Lucas (3, 1-2) y lo que la mayoría de los cristianos recita en el Credo: Cristo “fue crucificado bajo el poder de Poncio Pilato”.

Plinio el Joven

Legado imperial para las provincias del Ponto y de Bitinia (año 112)

Por otra parte, estos [cristianos] afirmaban que toda su culpa o su error había consistido en la costumbre de reunirse en un día determinado antes de salir el sol, y cantar entre ellos sucesivamente un himno a Cristo, como si fuese un dios, y en obligarse bajo juramento, no a cometer cualquier delito, sino a no cometer robo o adulterio, a no faltar a lo prometido, a no negarse a dar lo recibido en depósito. Concluidos estos ritos, tenían la costumbre de separarse y reunirse de nuevo para tomar el alimento, por lo demás ordinario e inocente.  Cartas al Emperador Trajano X, 96).

Importancia: Este es uno de los primeros textos fuera de la Biblia que utiliza el título “Cristo” (ungido, en hebreo “Mesías”) para referirse a Jesús. Muestra que los cristianos adoraban a Cristo como a Dios desde los inicios de la iglesia, cuando todavía no había transcurrido un siglo desde su predicación y muerte. Afirmar la divinidad de Jesucristo no es entonces una ocurrencia política del emperador Constantino como afirma equivocadamente la popular novela “El Código Da Vinci” en el capítulo 55.

Suetonio

Historiador romano (año 120)

Nerón, ha hecho mucho mal, pero no menos bien. Los cristianos, hombres de una superstición nueva y maléfica, fueron condenados a muerte. (Vida de Nerón XVI, 2)

[El emperador Claudio] expulsó de Roma a los judíos por promover incesantes alborotos a instigación de un tal Cresto. (Vida de Claudio XXV, 4).

Importancia: La expulsión de los judíos de Roma ocurrió cerca del año 49. La Biblia también registró este acontecimiento: “[Pablo] se encontró con un judío llamado Áquila, originario del Ponto, que acababa de llegar de Italia, y con su mujer Priscila, por haber decretado Claudio que todos los judíos saliesen de Roma” (Hechos de los Apóstoles 18, 2). Este texto es un testimonio de la presencia de los cristianos en Roma menos de 20 años después de la muerte de Jesús en Jerusalén. La fe de los cristianos en Jesús como Mesías provocaba ya altercados entre los judíos de la ciudad.

El Talmud y la tradición judía

Podemos resumir lo que dice el Talmud y la Torá oral sobre Jesús en estas afirmaciones que nos aclaran la visión que el judaísmo rabínico tenía de Jesús en los primeros siglos de existencia del cristianismo:

• Jesús tuvo discípulos (Sanedrín VI, 1; f43a).
  
  
• Jesús no pretendió anular la Torá (Shabbath XV, 1, f.116a-116b)
  
  
• Jesús comentó la Torá de forma similar a los fariseos (Avodá Zará I, 7, f.16b-17a)
  
  
• Jesús contradijo a los fariseos y a los escribas pero siempre habló bien de Israel (Gittin V, 6, f.56b-57a)
  
  
• Jesús pretendió ser Dios (Yalku Simeón-Midrash Ielamdenu, 725)
  
  
• Jesús realizó prodigios pero fue acusado de hechicería (Sanedrín VI, 1; f.43a)
  
  
• Los discípulos de Jesús curaban enfermedades en su nombre (Tosefta, Shehitat Hul-lim 2, 22-23)